Sí, son unos gorros, ¡pero son mágicos! Tienen el superpoder de poder ayudar a mujeres a que ahora, su realidad es el cáncer de mama. Si te lo pones, te vas a sentir poderosa, porque tendrás el poder de ayudarlas. Porque los gorros pinkmama ayudan a sentirse guapa, a ir a la moda, a sentirse calentita, a sentirte protegida, empatizar, apoyar, a verte mejor, a sentirte parte de un colectivo, a vivir por una causa… Todo esto y más, sólo depende de que tú y muchos, ¡regalemos uno!
es...
El proyecto
#tribupinkmama
Un espacio donde nos juntamos personas que queremos ayudar. Aquí te vas a sentir acompañado, porque vivimos la vida pensando que el concepto “togetherness” es muy potente. En que juntos, todo es más fácil. La unión hace la fuerza, es un tópico, pero es totalmente verdad.
Las mujeres que pasan por un cáncer de mama, son poderosas, pero el cáncer es una criptonita muy cabrona (con perdón de la expresión). Pongámonos a su lado, y te prometo, que ellas lo van agradecer, yo hoy en día, no dejo de dar gracias a los que estuvieron allí junto a mí. Pasándolo conmigo.
¿Quieres ayudar? Contacta y dinos qué quieres hacer, aportar ideas…
Ayuda: regala
Y ahora, te toca a ti, conviértete en #ayudantepinkmama, tendrás todo nuestro agradecimiento. ¡Activa tu superpoder! ayudando a las mujeres que ahora están pasando por un cáncer de mama. Regala un gorro con superpoder, ahora!, lo haremos llegar a una unidad de oncología a tu nombre.
Blog
Un lugar donde encontrarás tips, testimonios, proyectos… Vamos a resolver necesidades, a despejar dudas, a darte pistas. Se hablará de temas entorno al cáncer, el hogar, la creatividad y el wellness. ¡Encontrarás también historias de nuestras #ayudantes preferidas!
Contenidos pensados para que lo que allí encuentres, te ayude.
Marta
Me llamo Marta Vilar. Los Reyes de 2016, me trajeron un presente inesperado. Un cáncer de mama. Era diseñadora téxtil, y lo volví a ser, gracias a él. Crear para ayudar, no para vender. Descubrí mi verdadero yo. Tenía 38 años y mi hija 6.
Si quieres conocer sobre mí, pásate por el apartado Marta…